La conversión ecológica
El papa Francisco promulgó la encíclica Laudato si´, con la intención de promover el diálogo acerca de nuestra casa común, la crisis ecológica es una llamada a una profunda conversión interior porque todos estamos llamados a proteger nuestro mundo. La crisis ambiental afecta de manera particular a los pobres y a los vulnerables.

“Muchas cosas tienen que reorientar su rumbo, pero ante todo la humanidad necesita cambiar. Hace falta la conciencia de un origen común, de una pertenencia mutua y de un futuro compartido por todos. Esta conciencia básica permitiría el desarrollo de nuevas convicciones, actitudes y formas de vida. Se destaca así un gran desafío cultural, espiritual y educativo que supondrá largos procesos de regeneración” (capítulo sexto “Laudato Si”)
Las implicaciones para los Colegios Jesuitas son claras, significa preparar a los estudiantes y sus familias para identificarse y sentirse responsables de toda la creación; asumir la visión de amor por el mundo. Para tal fin, la educación ambiental forma parte del núcleo del currículo incorporando:
- Una ética ecológica.
- Un hermanamiento entre colegios en todo el mundo que se oriente al cuidado de la creación.
- Programas de servicio y defensa de la comunidad donde los estudiantes enfrenten:
- La contaminación del aire y el agua.
- La pérdida de hábitat que ha llevado formas de vida al borde de la extinción.
Nuestros colegios deben hacer todo esfuerzo para llegar a ser ambientalmente sostenibles, mediante:
-
La reducción de su huella de carbono.
-
Comprando productos que hayan sido producidos responsablemente y que sean reciclados apropiadamente.